De qué manera un registro me ayudó a descubrir una historia familiar

how a record helped me

Los registros históricos cuentan historias sobre nuestros antepasados, historias que quizás no aprenderíamos de ninguna otra manera. Los registros de censos, registros civiles, registros militares y más, todos ellos abren puertas al pasado. Aprendemos sobre la vida cotidiana de nuestra familia y sus acontecimientos importantes, sus desafíos y alegrías. Los registros históricos también pueden ayudarnos a encontrar parientes que no sabíamos que existían.

Los indexadores ponen esos registros a nuestra disposición. En lugar de estar encerrados en un archivo, los registros están disponibles en la comodidad de nuestro hogar. En vez de dedicar horas a buscar en libros o microfilmes, podemos localizar registros rápidamente en nuestra computadora o dispositivo móvil.

Gracias, indexadores.

Les preguntamos a nuestros usuarios de qué manera un registro les ayudó a descubrir una historia familiar, y ellos compartieron muchas historias con nosotros. Cada una es fuente de inspiración y testifica de la obra importante que nuestros indexadores voluntarios están haciendo.

Dedica unos minutos a compartir tu historia sobre cómo un registro te contó más acerca de tu familia y a agradecer a los indexadores que lo hicieron posible.

Sus historias, a continuación.

“Una de las cosas que se destacan en mi mente fue la ocasión en que ¡encontré a mi familia en el manifiesto de un barco! ¡No lo podía creer! Allí estaban mi cuarto abuelo y su esposa con sus 13 hijos y varios nietos, uno de los cuales era mi bisabuela Louisa, a quien conocí en esta vida. Ella tenía 4 años en el momento de su llegada, según los registros”.

Pie de foto: Registro de inmigración de las familias Baer y Mueller

“Mi bisabuela era una de entre 12 hijos, y a lo largo de los años he llegado a conocer a todos sus hermanos por medio de registros de censo, nacimiento, matrimonio y defunción. Sin embargo, Janet, su hermana mayor, ¡me eludió durante dieciocho años! Tenía su fecha de nacimiento en Escocia, donde todos nacieron, y luego aparecía en un registro de censo cuando ella tenía 14 años. Después de eso, nada. Parecía que hubiera desaparecido de sobre la faz de la tierra. Un día, hace unos dos años, obtuve una sugerencia de registro de matrimonio de Janet de Quebec, Canadá. En FamilySearch.org, pude consultar el registro de matrimonio original y verifiqué a los padres de Janet y que este fuera en verdad su certificado de matrimonio. A partir de ese momento, encontré que se había mudado a Canadá cuando tenía veintitantos años y que se había casado con Edward. Un año más tarde, ella tuvo un hijo, Albert, que vivió unos pocos minutos y murió. Pude completar la historia de la familia entera por medio de muchas otras sugerencias, todo gracias a la ayuda de los indexadores y de FamilySearch.org”.

Pie de foto: La lápida de Edward y Janet Goddard

“Yo estaba haciendo la indexación de registros de inmigración a través de FamilySearch. Me encontré con el nombre de un familiar, Jack Caston, pero pensé que debía haber miles con el mismo nombre. Luego, me di cuenta de que llegó a los Estados Unidos poco después de que lo hicieran mis abuelos paternos, quienes eran inmigrantes judíos sefarditas que vinieron de Turquía durante los conflictos de los Balcanes y la Primera Guerra Mundial. Entonces noté que, de hecho, era primo de mi abuela. El registro utilizaba la dirección de ella como la dirección a la que él se mudaría en la comunidad sefardita de Seattle, Washington. Por supuesto, aprendí mucho más acerca de las características físicas y otras cosas que figuraban en el documento”.

Pie de foto: Clara Caston Haleva, de Rodosto, Turquía, murió en Seattle, Washington, en la década de 1930.

“Un día, mientras le enseñaba a un usuario a hacer historia familiar, decidí utilizar a mi propio padre como ejemplo de lo que había en FamilySearch.org. Hice una búsqueda del nombre de mi papá y descubrí un tesoro de información debido a que alguien había indexado su manifiesto de barco, en el cual él era uno de los muchos misioneros que estaban siendo evacuados de Europa Oriental porque se estaban lanzando bombas en Inglaterra.

Habíamos crecido oyendo las historias de cuando mi papá fue retenido junto con Hugh B. Brown durante un ataque aéreo. Sabíamos que él había regresado y que se le había reasignado a Pensilvania. Al leer el manifiesto por primera vez, vi los nombres de por lo menos 300 misioneros que estaban en ese barco; en él se incluían sus nombres, edades y lugares de origen.

Compartí esta experiencia con mi amiga, mientras trabajábamos en el centro de historia familiar. Sin yo saberlo, había encontrado una conexión con ella. Le estaba mostrando el manifiesto del barco y le dije las fechas de la evacuación. Entonces ella extrajo el obituario de su abuelo Ralph Griffin; él estaba en Inglaterra al mismo tiempo que mi padre. Lo encontramos en el barco, y tuvo acceso a su diario personal.

No solo su abuelo estaba en el barco en el que estaba mi papá, sino que era en realidad el compañero de misión de mi padre en el momento de la evacuación. En las fotografías de mi papá había fotos de su abuelo. En el diario de su abuelo había fotos e historias de mi papá que yo no conocía. La magnitud de mis descubrimientos se hizo posible gracias a que alguien indexó esos registros”.

Pie de foto: Conferencia de Altoona, 27 y 28 de enero de 1940

“Gracias a Dios, estoy siento tanto agradecimiento a nuestro Padre Celestial, a las Autoridades Generales y al Departamento de Historia Familiar de la Iglesia por el programa de indexación y a los miles de indexadores en todo el mundo. Incluso después de cuarenta y cinco años de búsqueda de mis raíces, todavía tengo nuevos documentos por descubrir y conectar con mis antepasados. Apenas el año pasado, la residencia de mis bisabuelos fue revelada en el censo de Georgia de 1900, cuando de hecho habían residido en el condado de Barton, Kansas, durante los 20 años anteriores. Esto es algo que yo no podría haber encontrado sin ayuda. Y gracias a que dicho censo se había indexado se descubrió la ubicación del cementerio donde estaba sepultado. ¡Este programa es ciertamente inspirado! ¡Demos gracias a Dios!”

“Siempre nos habíamos preguntado de dónde provenía el nombre “Nudis”. Mi abuelo había llamado a mi papá Nudis y mi hermano, mi primo y mi sobrino comparten este nombre. Después de revisar varios registros, descubrí que su nombre era en realidad ‘Newtie’, por el esposo de su hermana, Newtigate Folds. Demasiado tarde para mi hermano”.

Pie de foto: Newtie Ogletree

 

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